UNA LÍDER DE ALTO IMPACTO

Desde pequeña sus padres le inculcaron el amor y el respeto por el mundo que habitamos. La combinación de esos valores y la sensibilidad hacia el daño hecho como comunidad al planeta influyeron en la decisión de Karen Winekker de liderar proyectos con impacto, que generen un cambio positivo en la sociedad y el medioambiente.

Fotografía: Ismael Prado. Dirección de producción: Bethania Achón.

Se define como una persona tranquila, un poco introvertida, conciliadora, sensible y empática; pero a su vez, muy resolutiva y apasionada por las causas en las que se involucra. “Me pongo una meta y no paro hasta conseguirla, soy perseverante y perfeccionista, lo cual a veces me juega en contra”, nos confiesa. Eso explica, en parte, por qué desde ya muy joven ocupa cargos importantes en busca del propósito que persigue cada día: trabajar por una economía regenerativa, inclusiva y equilibrada.

Actualmente, Karen es directora de Envaco SA,  una  firma familiar que fabrica envases de cartón corrugado. Además, lidera una unidad de negocios llamada Talier, que se dedica a la innovación con cartón, diseño y fabricación de productos ecológicos para reemplazar los materiales tradicionales contaminantes. Desde junio de 2020 se desempeña como presidenta de la junta directiva de Sistema B Paraguay, un movimiento global de empresas que trabaja por una economía donde el éxito se mide por el bienestar de las personas, la sociedad y el medioambiente.

Pero todos estos roles se dieron de manera sorpresiva para Karen, no lo planeó de esta manera. Siempre tuvo un gran amor por la naturaleza. “Cuando era niña,  quería ser ingeniera ambiental, ecologista o seguir alguna carrera que me permitiera salvar a los animales y su hábitat”, nos cuenta y prosigue: “Es increíble que a pesar de que la vida me llevó hacia un camino empresarial, pude combinar ese propósito y sensibilidad hacia la conservación de nuestro planeta, con la profesión para la cual me preparé”.

 En la secundaria, Karen se declinó por el bachillerato en Diseño Gráfico y Publicidad. “Cuando terminé el colegio, conseguí un trabajo genial en una agencia de marketing BTL. Me gustaba tanto que decidí desarrollarme en esa área”, detalla. Así, en 2013 se graduó en la carrera de Ingeniería en Marketing y Publicidad en la Universidad Americana. Luego, se involucró en la empresa familiar en un rol administrativo; entonces también hizo un máster en Administración de Empresas en la Universidad Austral de Buenos Aires, Argentina –IAE Business School– en 2016. “Aprendí muchísimo de gestión empresarial y el impacto que tienen las corporaciones en la economía”, menciona.

 Para aportar al bienestar de la comunidad y el ambiente que habitamos, en 2018 Karen quiso que Envaco formara parte del Sistema B, por lo que empezó el proceso de certificación. Para ello la compañía debía medir su impacto ambiental y social con el mismo rigor que sus metas financieras. A inicios de 2019 cumplieron con las exigencias y la invitaron a participar del directorio. Un año después se convirtió en presidenta y, desde entonces, se encarga de asegurar el crecimiento del Movimiento B en Paraguay, en conjunto con la junta directiva; brinda una mirada estratégica y sistémica a su equipo operativo y lo guía hacia la construcción del propósito.

 Con ese bagaje, el reto más desafiante en su carrera fue en 2020. “La pandemia trajo un contexto económico, social y de salud muy complicado, proyectar cualquier objetivo con esa incertidumbre no fue fácil. De todas maneras, considero que los momentos más desafiantes promueven la creatividad, y nos fortalecen y preparan para el futuro”, afirma.

CONSIDERO QUE LOS MOMENTOS MÁS DESAFIANTES PROMUEVEN LA CREATIVIDAD, Y NOS FORTALECEN Y PREPARAN PARA EL FUTURO

A nivel profesional, Karen se siente muy orgullosa del grupo humano en el que se desempeña y confiesa que sus compañeros y compañeras son su felicidad de todos los días: “Lo que más me gusta es trabajar con un equipo de personas inspiradoras que me hacen crecer y aprender, motivadas por el mismo propósito y apasionadas en su labor”.

Otra de las satisfacciones que le brinda su trabajo es contribuir con un bien mayor. “Me di cuenta de que cuando la causa es más grande que nosotros y ponemos nuestras energías en proyectos que construyen el futuro que necesitamos como humanidad, la retribución es mucho mayor y gratificante que cualquier otro reconocimiento, ya sea económico o no”, detalla ella.

De esa manera, Karen intenta que cada elección y acción que realiza sea desde un lugar de impacto positivo en la comunidad. Así, esta joven empresaria dedica parte de su vida a construir un mejor país y aporta a un mundo más amigable con la naturaleza, una loable tarea digna de admirar. “La construcción de conciencia y el cambio cultural es un trabajo a largo plazo y se convirtió en mi mayor meta a futuro. Todavía hay mucho que edificar para alcanzar el país que todos los paraguayos soñamos, pero siento que estamos formando grandes cimientos”, finaliza.

COMPROMISO SOCIAL

Envaco SA fue fundada en 1990 por Rodolfo Winekker Zuza, el padre de Karen, con un capital 100% nacional. La empresa cuenta con un modelo de responsabilidad social basado en tres pilares fundamentales: público interno, comunidad y medioambiente. Algunas acciones implementadas dentro de la compañía son: el uso responsable del agua, talleres de oficios para los familiares de sus empleados, la promoción del ahorro a través del reciclaje, charlas en las instituciones para concienciar acerca de la importancia de reutilizar, entre otras prácticas amigables con el planeta.