EL UNO PARA EL OTRO

A veces, en la vida se da un encuentro mágico entre dos personas que las une para siempre. Así ocurrió con Raquel Talavera Ricciardi y Adrián Harrison Campagnoli, quienes al conocerse quedaron encantados entre sí. Al poco tiempo experimentaron un amor sublime y especial. “Adrián llevó a su perro a una consulta y desde entonces no dejamos de hablar, a los pocos meses ya nos comprometimos”, recuerda la novia.

Fue así que, con la seguridad de estar hechos el uno para el otro, decidieron dar el siguiente paso y se comprometieron a quererse por el resto de sus días. Él le regaló el anillo y las buenas nuevas se extendieron a todos sus seres queridos. Pronto comenzaron los preparativos y la fecha fijada para el matrimonio fue el 2 de marzo pasado, en el Club Centenario en Surubi’i.

La cita estaba marcada para las 19.00. En primer lugar llegaron los familiares y amigos de la pareja; como marca la tradición, la novia se presentó minutos más tarde. Raquel fue recibida por su hijo menor, y luego, del brazo de su padre, Juan Ángel Talavera, se dirigió hasta su prometido ante la cariñosa mirada de todos sus invitados.

Luego de pronunciar sus votos y firmar la libreta matrimonial, Raquel y Adrián protagonizaron la mejor fiesta de su vida. Kiki González y Ruth Huespe estuvieron atentas a cada mínimo detalle de la organización, y el DJ Majul pasó lo mejor de su selección musical para diversión de todos los presentes.

DETALLES

Kiki González también se encargó de la ambientación del gran día de Raquel y Adrián. Ramas, texturas, cortezas y flores fueron protagonistas de la deco montada al aire libre. Por otro lado, Caffe San Marco se ocupó de preparar el menú de la velada.