MARÍA ASUNCIÓN PÉREZ RAMÍREZ, CA R O CASTILLO, ALE PAPPALARDO, CRISTINA BENDLIN Y STEPHIE CHASE

A menos de una semana de que se realice la primera edición de Moda por una causa, nos reunimos con las organizadoras del evento en la residencia de la señora María Asunción Pérez Ramírez, para que nos cuente todos los detalles. La idea nació como un homenaje a la mamá de María Asunción, la señora Nery de Pérez Ramírez, quien durante 30 años ejerció el cargo de presidenta de la Fundación Hospital de Clínicas y lideró la comisión de damas que trabajó incansablemente para proveer medicamentos a ese nosocomio.

Cristina Bendlin nos comentó que tomó la iniciativa de organizar este evento solidario por la admiración que sentía hacia la señora Nery. “Éramos vecinas, y desde muy pequeña empezó una amistad entre su familia y la mía. Ella influyó mucho en enseñarnos lo que significa la caridad, tener en cuenta al prójimo, ser empático y ayudar”, cuenta. Cuando después de un tiempo Cristina visitó a la señora Nery y la vio afectada por una enfermedad, la impactó tanto que decidió continuar con su legado. “Ese mismo día llegué a mi casa y hablé con mi hija Michelle, a quien justamente le dieron un título como Embajadora de la Paz en la ONU, y me pregunté: ‘¿Qué es paz sin caridad? La paz se obtiene cuando uno da a los más necesitados, ya sea amor, dinero o ayuda’, y ella me dijo con seguridad que teníamos que seguir el camino recorrido por Nery”, relató.

Con esa firme convicción, Cristina y su hija Michelle Chase comenzaron a planificar el evento benéfico que pronto tendría la aceptación de todas sus amistades. “Me impresionó como con una sola llamada a mis amigos y hermanos todos respondieron con muchísima predisposición y entusiasmo que sí. Entre ellos, María Asunción Pérez Ramírez, Ale Burró, Caro Castillo, Bettina Barboza, Cintya Poletti, Cynthia Chihan, Valeria Gallarini, Mirtis de Corrales, Lilia Acevedo y Carlos Burró, quienes estuvieron firmes desde el vamos”, dice Cristina.

Fue así como todo se puso en marcha. Cada uno iba aportando lo que podía, como una cadena de favores. Perfecta SA. puso la logística; Ale Burró ofreció uno de los premios del evento, que fue una suite en un viaje en barco por Europa para las islas de Grecia, Croacia, Montenegro y Capri; Valeria Gallarini se ocupó de la producción general; Caro Castillo tuvo a su cargo toda la decoración; Mirtis de Corrales preparó la comida, estimada para 280 personas; Keiki donó orquídeas; Mix It ofreció su barra de tragos; Casa Módiga puso las bebidas; Ivana Medal aportó mobiliarios de La Celestina; Cinthia Chihan dispuso los mozos; Cyntia Poletti donó joyas de su marca, y Carlos Burró preparó una colección exclusiva para el desfile, con 20 modelos.

Esta es la primera edición de Moda por una causa. El monto de la entrada equivale a una ampolla de quimioterapia que las organizadores consiguieron a un tercio del precio normal con el laboratorio Álamo. “Además de ser un evento benéfico en donde la gente va a disfrutar la excelencia del desfile de Carlos Burró, también queremos que sea cómico y divertido.

Por eso contratamos a dos comediantes que harán stand up, y para mayor realce hay importantes premios, como una s u i te para dos personas en un crucero por el Mediterráneo de Boarding Pass, una joya de Paula Mendoza, dos trilogías de belleza de De Marie, un kimono y un saco de Carlos Burró, vo u c h e r s para la cabina Dior (gentileza de Fuschia) y un cuadro de Masha Liachovitskaya de BGN/ARTE, entre otros obsequios. Hay muchísima gente que nos llama para poder entrar. Queremos producir dinero para ayudar. Toda la recaudación es a total beneficio”, mencionan las voceras.

Con esta primera convocatoria, las expectativas son muchas. Las organizadoras tienen como objetivo dejar la vara muy alta para que más personas se sumen a la causa y así poder expandirse hacia otros lugares del país. “Además de colaborar, queremos que el público pase un rato agradable con amigos. Así también, que otros tomen como inspiración este evento. Nosotras les vamos a apoyar. Nos gustaría que se haga también en Ciudad del Este, Pedro Juan Caballero, Encarnación; queremos llegar a todas partes”, afirman.

Ellas comentan que se sienten muy contentas de poder continuar el camino recorrido por la señora Nery y admiten que aunque no sea tarea fácil, están convencidas de que la unión hace la fuerza y de que en Paraguay hay gente muy solidaria dispuesta a ayudar. “Las necesidades de este país son infinitas. Esto es solo un granito de arena, pero es una manera de comenzar. Es la chispa que servirá de ejemplo de que los cambios se logran con la participación de todos. Por más que sea una tarea del Gobierno, sin lugar a dudas, hay que empezar con el cambio, y los que hemos recibido más tenemos el compromiso de compartir nuestro tiempo y hacer eso posible”, finaliza Ale Burró.