BEATRIZ REIDMAN, MYRIAM BENÍTEZ DE TORCIDA Y ADRIANA QUEVEDO

Su amistad comenzó en los 80, cuando Beatriz Reidman, Myriam Benítez de Torcida y Adriana Quevedo coincidieron en Líneas Aéreas Paraguayas, donde trabajaban en lo que más les gusta: el turismo. Apenas se cruzaron, surgió un gran cariño que perdura intacto hasta el día de hoy. Y aunque la vida las llevó por diferentes caminos y se desempeñaron en distintas agencias de viajes, siempre se las arreglaron para, de una u otra forma, juntarse a tomar un café, charlar por horas e incluso conocer destinos increíbles.

Tras tantos momentos vividos, recuerdos en común y con el rubro del turismo severamente afectado por la pandemia, este año surgió en ellas el deseo de emprender juntas. La idea se dio en una de sus habituales reuniones, en la que debatieron sus metas y proyecciones. Aunque todas las propuestas que lanzaban estaban relacionadas con cuestiones de la casa, sintieron que una era la indicada, pues las identificaba: decorar espacios del hogar inspiradas en lo que vieron durante sus vueltas por el mundo.

Los planes iniciaron de inmediato y pronto pusieron manos a la obra. Desde ya hace un tiempo, Myriam y Adriana deseaban volar hasta Río de Janeiro, Brasil, para tomar clases de manualidades en el atelier de Tati Carvalho, pero con la situación actual no lograron cumplir este anhelo. Siempre lo tuvieron presente, más aún con el surgimiento del proyecto. Entonces, decidieron acudir a Susana Bergues, una gran amiga en común, para que les dé cursos de técnicas de manualidades. Por su parte, Beatriz poseía contactos en el área textil y le gustó mucho la idea de aportar desde la blanquería y los accesorios. Una vez definidos los servicios que les gustaría ofrecer, siguieron con algo de igual importancia.

Emocionadas por los instantes de calidad a compartir en el desarrollo de este nuevo plan, e impulsadas por el deseo de despertar su creatividad al máximo, a Beatriz, Myriam y Adriana se les ocurrió titular esta labor en equipo como Vive la Casa en un principio, y hoy finalmente como Casapasionada. Cuando preguntamos por qué, Myriam confesó: “Nos encanta que el hogar tenga vida y emociones que nos transporten a los recuerdos. Al incorporar algo nuevo, uno se involucra y lo vive más plenamente”.

“El escritorio de mi casa se convirtió en un atelier en donde todo surge, entre pinturas, pinceles, hilos, telas y el buen humor que nunca falta”, comenta Adriana. Así, las amigas instalaron su espacio, definido indiscutiblemente por la libertad inventiva, la complicidad y el ambiente cálido en el que hacen realidad su marca. “La verdad, nos faltan más horas en el día para concretar las miles de ideas que tenemos. Todas coincidimos en que es igual que ir a un spa, porque no nos damos cuenta de que estamos trabajando”, afirma Beatriz, a lo que Myriam agrega: “Con más de 30 años juntas, anécdotas no nos faltan; empezamos muy temprano las actividades, y a veces terminamos el día descorchando un vino para continuar nuestras charlas, que nunca terminan”.

Así, rememoran los lugares que conocieron y los grandes hoteles que fueron refugio durante sus estadías en sitios desconocidos. Estas mujeres se inspiran en lo que más las enamoró de países extranjeros y lo plasman en coquetas cajas de té, bandejas, organizadores de cubiertos, posavasos, manteles, camineros, servilletas, macetas, colgadores de llaves o cualquier otra cosa que ornamenta un espacio del hogar y lo hace aún más acogedor.

Cada una cumple un rol indispensable para este sueño que comparten y que apenas comienza. “Adriana y yo somos las creativas, pintamos todo lo que sea madera, escogemos combinaciones, técnicas y colores para diseñar nuestros productos”, relata Myriam. “Yo me encargo de la administración, ya que la organización de las cuentas se me da de manera natural. También me ocupo de buscar opciones de accesorios y tejidos para la línea de blanquería que recientemente anunciamos en nuestra cuenta de Instagram, @casapasionadapy, donde se puede apreciar todo lo que hacemos con mucho amor”, dice Beatriz o Bety, como la llaman sus compañeras de cariño.

Casapasionada se caracteriza por la forma artesanal en que elaboran sus productos, lo que marca la diferencia con el resto del mercado, debido a que Beatriz, Myriam y Adriana se involucran en cada pequeña tarea que realizan. Por eso podemos afirmar que cada pieza creada en esta firma es única, exclusiva y personalizada, ya que escuchan los deseos del cliente. Otro punto bastante importante para las tres es llegar al corazón de muchos hogares mediante un precio accesible, algo también acordado desde el inicio.

Con el lema Darle un toque especial a tu hogar, esta marca no puede ser encasillada en un solo estilo. La visión con la que fue creada es muy amplia, aunque bien se podría decir que se inclina bastante por el estilo provenzal, toscano y vintage moderno, altamente solicitado desde su lanzamiento, más aún en intervenciones de mesa, indiscutible centro de unión familiar y de amigos, donde se celebran los más importantes acontecimientos.

«Casapasionada no puede ser encasillada en un solo estilo, pues la visión con la que fue creada es bastante amplia, aunque bien se podría decir que se inclina bastante por el estilo provenzal, toscano y vintage moderno, altamente solicitado desde el lanzamiento»

Ante nuestra interrogante acerca de qué es lo que más les gusta de decorar sitios de una residencia, confiesan que les fascina imaginar los miles de usos que pueden tener sus productos en el hogar y la manera en que una familia disfruta de este. “Cuando trabajamos, pensamos en qué espacio de la casa quedaría bien y los usos que le pueden dar a una caja, por ejemplo: si la pondrán en la cocina para organizar aceites, vinagres y especias, o en un baño para darle un toque especial. Disfrutamos cada detalle y en ese momento volamos con la imaginación”, cuenta Myriam.

Por su parte, Adriana afirma: “Me gusta la idea de que una bandeja puede tener varios usos, desde decorar una mesa ratona con velas hasta servir un manjar, ya que son diseños que se adaptan a las necesidades de las clientas”. A esto, Beatriz complementa: “Es por esa razón que posteamos en nuestra cuenta las diferentes maneras en que la pueden utilizar”.  Sin dudas, Beatriz, Myriam y Adriana viven el sueño que muchas desean: hacer lo que uno ama en la mejor compañía de todas. Las tres están bastante emocionadas por el porvenir de Casapasionada y en sus libretas tienen anotados muchos planes que quieren cumplir. “La idea es crecer en el futuro, seguir innovando en lo que hacemos y, por supuesto, contar con una tienda propia donde exhibir lo que hacemos con tanto amor”, finalizan.