ALEGRÍA INFINITA

Fue en la cálida mañana del sábado 26 de setiembre último cuando el pequeño Federico Schussmuller Weiler recibió por primera vez a Dios en su corazón. Aquella fecha transcurrió inmensamente feliz para sus orgullosos padres, Rodrigo Schussmuller Insfrán y Kristel Weiler Torres y, por supuesto, sus seres queridos.

La íntima celebración del bautismo tuvo como escenario a la Iglesia Oblatos de María, hasta donde llegaron únicamente los abuelos y los cinco padrinos del niño. Daniel Vierci, Gabriela Larré, Arturo Weiler, Astrid Gunther y Martín Urbieta fueron los elegidos para llenar la vida de Fede con fe y valores cristianos. En la emotiva ceremonia religiosa, el protagonista fue ungido en el baño bautismal  enfundado en un faldón tradicional, presente en su familia por 60 años.

Una bonita reunión se dio más tarde en el hogar de los Schussmuller-Weiler, sitio donde disfrutaron de un distendido almuerzo familiar. La ocasión fue propicia para sumar instantes al álbum de fotos con el fotógrafo Javier Vera. Al final del bendecido día, los invitados se llevaron a casa como recuerdo unas pulseritas de San Benito.

DETALLES

Tras la misa, todos encontraron la residencia lista y puesta con la decoración ideada por Achi Vera. La familia compartió, entre risas y anécdotas, un bufé de pastas preparado por California. La mesa de postres, centro de las postales, fue montada con delicias de La Oma, De la Casa Pederzani y La Nieta de Tata.