UNIÓN DIVINA

En la vida existen momentos que son especiales por sí solos, pero al compartirlos con personas queridas, las emociones se intensifican. Uno de esos instantes lo experimentaron Nicole Jacks Serrati y Emilio Benítez Sarubbi cuando afianzaron su amor y se dieron el sí, quiero ante Dios en una anhelada boda que tuvo lugar en la iglesia Santísima Trinidad.

Luego de nueve años de un dulce noviazgo, la pareja se comprometió en 2019 y firmó el acta de matrimonio civil en octubre del año pasado. Tras meses de preparativos y, sobre todo, mucha emoción, finalmente llegó el día de la ceremonia religiosa. Nicole arribó a la iglesia a bordo de un automóvil clásico descapotable y fue recibida por su padre, Rubén Jacks.

 En ese momento develó el secreto mejor guardado de toda novia: el vestido. Un traje romántico con finos detalles que ella misma diseñó para su mejor cita. Feliz, emprendió su marcha nupcial sobre una pasarela espejada, donde la aguardaba su prometido.

 Fue una misa cálida, con las luces de un resplandeciente día soleado y en compañía de sus familiares y amigos, tal como Nicole y Emilio planearon. Minutos después de salir del templo, con la intención de seguir la celebración, los nuevos esposos y sus invitados se trasladaron hasta el Castillo Remanso para disfrutar de una divertida fiesta.

Tanto el lugar como la ambientación, la música y la comida fueron elegidos por los novios, que no dejaron ningún detalle librado al alzar. La recepción estuvo coordinada por Désireé Grillon & Adriana Saccarello Event Planning; la musicalización quedó en manos del DJ Hallam Nolan, mientras que el fotógrafo Julio Zárate capturó los mejores recuerdos del acontecimiento.

DETALLES

El sello de Óscar Guccione quedó estampado en la elegante decoración de la recepción nupcial. La mesa de dulces contó con delicias de Larissa Fustagno, y la torta fue de Adalia Martínez. Los presentes disfrutaron del menú servido por el restaurante Talleyrand, que acompañaron con refrescantes tragos de Mix It.