PARA SIEMPRE

«Nos conocimos en 2016 en San Bernardino, cuando acompañé a una amiga a un cumpleaños al que fui sin muchas ganas. Allí, con Renato intercambiamos algunas palabras, pero fue recién unos meses después que nos volvimos a ver. De alguna u otra manera nos flechamos». De esta forma recuerda Giselle Van Humbeeck Castillo aquel primer momento en el que supo que Renato Daud Scavone sería su verdadero amor. 

Renato y Gigi –como le dicen de cariño– disfrutaron de varias experiencias desde aquel año. Juntos encontraron todo lo que les generaba felicidad y, sin esperar más, decidieron unir sus vidas en matrimonio. 

La propuesta fue memorable, pues los novios tenían como costumbre viajar para las fiestas de fin de año. En esta ocasión, los destinos fueron París en Navidad y Londres en Año Nuevo. «Todos pensaron que sería en París. De todas formas, no esperaba nada porque él siempre me dijo que jamás lo haría durante un viaje. Pero fue en el London Bridge viendo los fuegos artificiales, cuando a las 00.00 me di vuelta para abrazarlo y él, ya con el anillo, me propuso que fuera su esposa», nos cuenta feliz la novia. 

La noticia no tardó en llegar a sus familiares y los preparativos empezaron de inmediato. Pero por la pandemia, la boda organizada y cuidada en todo momento por Désireé Grillon y Adriana Saccarello Event Planning tuvo varios cambios.

El gran día finalmente llegó el pasado 17 de octubre. Los novios eligieron San Bernardino –la ciudad donde se conocieron– para casarse. La iglesia fue Nuestra Señora de la Asunción, a la cual Gigi ingresó tranquila y contenta del brazo de su padre, José Van Humbeeck. Luego del sí, quiero y el intercambio de alianzas, partieron rumbo a un íntimo brindis. El festejo se realizó con un almuerzo en Tatano Posada Boutique donde, acompañados de su núcleo familiar más cercano, disfrutaron de una divertida tarde cargada de emociones y felicidad. 

«Sentimos muchísimo cariño de parte de todos, fue duro porque nos hubiese gustado invitar a más personas y familiares que viven en el extranjero, pero fuimos muy bendecidos por la retribución de ellos a la distancia. Ese día fue perfecto», finaliza.

DETALLES

La decoración fue realizada por La Creme Bazar y lució muy elegante y descontracturada con arreglos de rosas, astromelias, eucaliptos y pampa grass junto a lámparas de mimbre y canastos de tacuarilla que mantuvieron la esencia natural de los espacios. El servicio gastronómico fue de Stuppendo, mientras que de los tragos se encargó Lo Prete Bartenders. Para la hora del postre, los presentes disfrutaron de los dulces preparados por Sofi Barszez, sobrina del novio.