
MAIS QUE TUDO
Nicole Wood y Antonio Mansur, ella paraguaya, él brasileño, dos almas apasionadas por el movimiento, la naturaleza y la conexión auténtica. Se conocieron un domingo cualquiera, entre risas, amigos y una partida de buraco en la que el azar los puso en el mismo equipo. Fue en agosto de 2023, y entonces nació una chispa.

El amor floreció rápido, con toda la intensidad. La propuesta llegó en plena cima de los Pirineos, tras seis horas de trekking y 38 kilómetros recorridos, pues ambos son atletas. Con las piernas cansadas pero el corazón encendido, Antonio preparó un picnic con vino en lo más alto de la montaña, y allí le pidió a Nicole que fuera su compañera de vida. Ella dijo que sí, con el viento acariciando el momento y el mundo entero a sus pies.
La boda se celebró el 17 de mayo de 2025, en Es Vedrá, San Bernardino, rodeados de la energía especial del lugar y del amor de quienes más quieren. Días antes ya se vivía la emoción, con amigos y familiares que llegaron de Brasil. Nicole se preparó en Villa María junto a sus amigas; una vez lista, partió rumbo a la capilla San Gabriel en el establecimiento de Es Vedrá.
El camino hacia la capilla fue largo, pero para Nicole, la emoción lo hizo eterno. Desde el auto, alcanzó a reconocer a su papá, Antonio, que la esperaba en la entrada. Al verlo, las lágrimas brotaron; y con Guillermo en el altar, ya no pudo contenerlas. Cada paso hacia él fue un latido cargado de amor, presente y futuro. La pareja se dio el sí ante sus padrinos y todos sus seres queridos.
Luego de la emotiva ceremonia, la noche tomó un giro vibrante con una celebración que fue pura energía, sin pausas ni filtros. Entraron bailando Volare, y compartieron su primer baile con Pra você guardei o amor. DJ Hallam fue impecable y Nico Baladon mantuvo la fiesta en movimiento. “Bailamos con todos, fue perfecto”, cerró el relato Nicole.
DETALLES
UNA NOVIA AUTÉNTICA
Nicole pasó la noche previa en el Hotel Villa María, en San Bernardino, junto a dos de sus mejores amigas de la infancia. Desayunaron con calma, trotaron un poco para liberar los nervios y luego comenzó la cuenta regresiva. Para el gran día, ella eligió dos creaciones de Florencia Nicora. El primero fue un imponente vestido palabra de honor, casi una escultura hecha a mano. El segundo fue puro espíritu festivo, fiel a su alma aventurera: bordado en plateado, con plumas, acompañado de unos calzados deportivos, también bordados por Florencia. Un look pensado para bailar y disfrutar.