PARA TODA LA VIDA
Hace seis años, en medio de la energía de una fiesta, el amor de Victoria Díaz de Vivar Angulo y Tiago Zavala Napout comenzó a escribirse. Fue gracias a la prima de ella y el hermano de él que sus caminos se cruzaron por primera vez, para que se dé aquel encuentro que transformaría sus vidas para siempre. Un noviazgo sólido, construido sobre años de cariño y complicidad, culminó en el sí, quiero más esperado.
La propuesta de matrimonio, tan ingeniosa como romántica, sorprendió a Victoria por completo. Tiago la había invitado a un «brunch familiar», pero al llegar al lugar, la ausencia de los demás presagiaba algo más. Mientras esperaban, él le entregó un libro, supuestamente para su tío, y le dijo que sentía que a ella le gustaría más. Al abrirlo, encontró una caja con el anillo en la primera hoja. En ese instante, Tiago se arrodilló para hacer la pregunta que lo cambiaría todo.
El gran día de su unión llegó la tarde del sábado 1 de junio, con la solemne ceremonia religiosa en la imponente Catedral Metropolitana de Asunción. Victoria deslumbró con un maravilloso vestido diseñado por Florencia Soerensen, quien también fue la artífice de su velo. Su delicado ramo, una creación de Florencia Roa de La Efe, complementó a la perfección.
Tras la emotiva misa, la celebración continuó en Talleyrand Costanera, un escenario perfecto para la alegría desbordante. La musicalización estuvo a cargo de un trío de DJs de primer nivel: Nacho Casals, Pitriki y Hallam, quienes se aseguraron de que la pista de baile vibrara sin descanso. Fue una noche donde cada risa, baile y abrazo se sumó a la atmósfera de felicidad que envolvió a Victoria, Tiago y todos sus invitados. Para la pareja, este día fue insuperable, desde el amanecer hasta el último baile, lo que hace imposible elegir un solo momento como el más emocionante.
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