LA VIDA CONTIGO
En tiempos inciertos y distanciamiento social, el destino jugó una carta mágica al unir los caminos de Nabila Nazzira Jure Máas y Federico José Llamosas Mujica. Su historia de amor comenzó hace dos años, cuando unos amigos en común decidieron presentarlos. Lo que ninguno de ellos sabía en ese momento era que estaban a punto de embarcarse en un viaje lleno de momentos inolvidables.
La primera cita de la pareja fue una experiencia única: en plena pandemia, optaron por disfrutar de un autocine, actividad que se hizo bastante popular en ese entonces. De esa manera, con una película y en la comodidad de su propio automóvil, iniciaron una conexión profunda que se fortaleció con el tiempo.
La propuesta de matrimonio llegó durante un viaje a las hermosas islas de Capri, Italia. En un paseo romántico en barco, rodeados por la belleza natural y la brisa marina, Federico encontró el momento perfecto para hacer la pregunta más importante de todas. Nabila aceptó emocionada y comenzaron a planificar su boda de ensueño.
El 17 de junio pasado, la pareja se unió en sagrado matrimonio en la iglesia de la Santísima Trinidad. Al llegar a la puerta del templo, Nabila sintió la magnitud de aquel día tan esperado. Allí, en el altar, Federico la esperaba con una mirada llena de amor y felicidad. Nabila intentó no hacer contacto visual con su prometido porque sabía que eso le provocaría lágrimas de emoción, así que se mantuvo serena. Pero de todos modos no pudo evitar sentir cómo la emoción se apoderaba de ella.
Al finalizar el acto litúrgico, los nuevos esposos disfrutaron de una elegante recepción en El Castillo Remanso, donde se pudo apreciar el maravilloso atardecer cargado de nubes grises y tímidos rayos de sol. Sin dudas, fue un día que quedará grabado para siempre en el corazón de Nabila y Fede.
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