LA VIDA JUNTOS

Marian González y Juan Martín Méndez ya llevaban tres años de novios cuando fueron a elegir un departamento. Juan le dijo que tenían que ir al lugar a firmar unos documentos para concretar la mudanza. Grande fue la sorpresa de ella cuando entró y encontró un montón de velas que formaban la frase: ¿Te querés casar conmigo?, entre sushi y champán, ningún mueble y cientos de pétalos de rosa que cubrían una tarjeta que decía: Bienvenida a nuestro nuevo hogar. La propuesta fue el día de su aniversario de novios. La pareja se preparó para el gran día durante poco más de un año, y finalmente la cita fue en abril, en la iglesia La Piedad. Marian se hizo esperar un poco: llegó unos minutos después de la hora pautada temblando de emoción, mientras el coro de la Compañía de Violoncello anunciaba su llegada. “No podía creer que era yo la protagonista, todo fue un sueño tan lindo, surreal, no me cayó la ficha hasta salir de la iglesia, un sentimiento inexplicable. Puede sonar como un cumplido, pero es verdadero, fue mejor de lo que soñamos”, admite la novia.

Ese día optó por vestir un diseño de Carlos Burró, un traje en mikado de seda natural bordado a mano con racimos de perla. El brindis fue en El Castillo de Remanso, y hasta el lugar llegaron amigos y familiares de los novios. La fiesta estuvo ambientada con mucho brillo y glam en cada detalle, decoración que llevó el sello de Karen Dalles.

DETALLES

La organización y coordinación general estuvo en manos de Martha Pérez y Celia Benítez para M&C Eventos. Talleyrand propuso una mesa de antipastos y de fondo, bufé caliente. Al final de la fiesta hubo sándwiches de milanesa. La barra de tragos fue de Mix It y los dulces, de La Oma.