FALLING IN LOVE

Alelí Gustale Gill e Imanol Torcida Fustagno unieron su vida en matrimonio. La boda, que estuvo llena de amor, alegría y significado, reunió a familiares y amigos para celebrar la unión de dos almas afines.

La ceremonia religiosa tuvo lugar en la iglesia Santísima Trinidad a las 15.00, el sábado 12 de agosto pasado. Fue un emocionante enlace que simbolizó no solo el compromiso de Alelí e Imanol, sino también la fusión de dos familias que comparten los mismos valores.

Los novios se conocieron en el casamiento de la hermana de Imanol, Milagros, el 10 de setiembre de 2016. Un encuentro casual en la pista se convirtió en un baile que duró toda la noche. Ese momento marcó el comienzo de casi siete años de noviazgo que culminaron en una propuesta de matrimonio que dejó a Alelí sin palabras.

El día de la boda, a pesar de las predicciones de lluvia, estuvo hermoso, despejado y fresco. La novia optó por un vestido diseñado por Romina Ruffinelli, un traje romántico de encaje adornado con detalles cuidadosamente elaborados, como botones que recorrían la espalda. El simbolismo y la emoción rodearon cada aspecto de su look. Desde los guantes de la abuela materna de Alelí, pasando por el rosario de su abuela paterna, hasta los aros de su mamá y los accesorios de sus hermanas, cada detalle único contaba una historia de amor, familia y tradición.

La novia llegó a la iglesia con sus hermanos en el BMW convertible de su papá. Luego de dar el sí, quiero e intercambiar anillos, los novios fueron agasajados con papel confeti al salir del templo, mientras sonaba Cumbiana, de Carlos Vives. El paso siguiente fue celebrar la unión con todos sus invitados en Puerto Liebig.

DETALLES

La organización del evento estuvo a cargo de Désireé Grillon & Adriana Saccarello Event Planning. Talleyrand dispuso el menú de la noche y la mesa de dulces fue trabajo de Lari Fustagno, prima del novio. Por su parte, Óscar Guccione decoró el salón con mucho follaje natural. Las flores de alhelí, en honor a la novia, fueron grandes protagonistas, coparon la iglesia y también estuvieron presentes en el ramo, hasta los solaperos tenían capullos.